A comienzos de año dedicamos un post a hablar de la necesidad de TRANSformar, animados por Asier Gallastegi. Y un poquito después, colaboramos con Alfredo y Maider en el blog de FuntsProject para hablar sobre el diálogo para emprender.
Ahora, unos seis meses después, vemos la necesidad de reivindicar el diálogo, necesario en todas las estructuras de participación.
Hace unas semanas, el Ayuntamiento de Getxo ha puesto en marcha una iniciativa para impulsar la participación de la ciudadanía en las zonas de Salsidu y Sarrikobaso. Se han instalado unos buzones de color caldera donde las personas podemos dejar nuestras opiniones sobre esas zonas, cómo mejorarlas, etc.
Como idea no está mal, pero nos gustaría saber cuál va a ser su seguimiento, el rendimiento posterior y los resultados finales. También nos gustaría saber si realmente la gente se ha enterado de qué va el asunto. Se ha publicado en Getxoberri pero ¿lo habrá entendido la gente? Y si lo ha entendido, ¿se animará?
Trabajar en la creación de espacios de participación ciudadana en nuestros pueblos y ciudades exige un ejercicio previo de pedagogía con nuestros vecinos y vecinas, que intuimos será largo, denso y sobre todo, ingrato. Ingrato sí, porque nos gusta arreglar el mundo de la mano de cañitas y tapitas, pero a la hora de la verdad, cuando hay que dar el callo, siempre esperamos que sea otra la persona que recoja el guante. Siempre hay motivos para el escaqueo. La vida que llevamos ahora, menudo juego que da…
Aplaudimos la iniciativa, pero no debería ser un brindis al sol para cubrir el expediente y revertir la responsabilidad de su hipotético fracaso a la ciudadanía. Porque para no tener hambre hay que enseñar a pescar mejor que dar el pescado sin más, también en esto de la participación hay que empezar desde abajo, desde estructuras pequeñas, para conseguir esos resultados que no por pretender su inmediatez, son los buenos…